Son piedras (cálculos) generalmente compuestas por minerales o bacterias que se forman en las vías urinarias y que pueden causar dolor, sangrado o una infección; así mismo, son capaces de bloquear el flujo de orina ocasionando daño al riñón.
Dependiendo de su ubicación, pueden dar dolor en la espalda, parte baja del abdomen o genitales.
Se asocian a infecciones de vías urinarias de repetición caracterizadas por ardor al orinar y/o fiebre.
En la mayoría de las ocasiones se acompañan de sangrado al orinar.